Calentamiento Global

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2011 nuevo record de emisiones, 3,2% más CO2 por la quema de combustibles fósiles


Fuente: Treehugger.com

Las emisiones globales de dióxido de carbono (CO 2) procedentes de la combustión de combustibles fósiles alcanzaron un nivel récord de 31,6 gigatoneladas (Gt) en 2011, según estimaciones preliminares de la Agencia Internacional de Energía (AIE). Esto representa un aumento de 1,0 Gt en 2010, o el 3,2%. El carbón representó el 45% del total de los relacionados con la energía las emisiones de CO2 en 2011, seguido por el petróleo (35%) y gas natural (20%).

El Escenario 450 de Outlook de la AIE World Energy 2011, que establece una vía de energía compatible con una probabilidad del 50% de limitar el aumento de la temperatura media global a 2 ° C, exige que las emisiones de CO2 a un pico de 32,6 Gt a más tardar el 2017 , es decir, sólo 1,0 Gt por encima de los niveles de 2011. El escenario de 450 ve a un desacoplamiento de las emisiones de CO 2 de PIB mundial, pero aún queda mucho por hacer para alcanzar esa meta como la tasa de crecimiento de emisiones de CO 2 en 2011 superó al del PIB mundial. «Los nuevos datos proporcionan evidencia adicional de que la puerta a una trayectoria de 2 ° C está a punto de cerrarse», dijo el economista jefe de la AIE, Fatih Birol.

En 2011, un aumento del 6,1% en las emisiones de CO2 en los países fuera de la OCDE fue sólo parcialmente compensado por una reducción del 0,6% en las emisiones dentro de la OCDE. China hizo la mayor contribución al aumento global, con sus crecientes emisiones por 720 millones de toneladas (Mt), o 9,3%, debido principalmente al consumo de carbón más alto. «¿Qué ha hecho China durante un período tan corto de tiempo para mejorar la eficiencia energética y desplegar la energía limpia ya está pagando dividendos importantes para el medio ambiente mundial», dijo el Dr. Birol. La intensidad de carbono de China – la cantidad de CO 2 emitido por unidad de PIB – se redujo en un 15% entre 2005 y 2011. Sin estas reducciones, las emisiones de CO 2 de China en el 2011 habrían sido superior en 1,5 Gt.

Las emisiones de la India aumentaron en 140 millones de toneladas, o 8,7%, pasando por delante de Rusia para convertirse en el cuarto mayor emisor por detrás de China, los Estados Unidos y la Unión Europea. A pesar de estos aumentos, per cápita las emisiones de CO2 en China e India siguen siendo sólo un 63% y 15% de la media de la OCDE, respectivamente.

Las emisiones de CO 2 en los Estados Unidos en 2011 se redujeron en 92 toneladas, o 1,7%, debido principalmente al cambio de curso del carbón al gas natural en la generación de energía y un invierno excepcionalmente benigno, lo que redujo la demanda de calefacción. Las emisiones de Estados Unidos han caído por 430 millones de toneladas (7,7%) desde el año 2006, la mayor reducción de todos los países o regiones. Este desarrollo ha surgido por el menor uso del petróleo  en el sector del transporte (vinculado a la mejora de la eficiencia, el aumento de los precios del petróleo y la recesión económica que ha recortado millas recorridas por vehículo) y un cambio sustancial del carbón al gas en el sector de la energía. Las emisiones de CO2 en la UE en 2011 fueron inferiores en un 69 millones de toneladas, o 1,9%, por el lento crecimiento económico que reduce la producción industrial y un invierno relativamente cálido que redujo las necesidades de calefacción. Por el contrario, las emisiones de Japón aumentaron en 28 millones de toneladas, o 2,4%, como resultado de un aumento sustancial en el uso de combustibles fósiles en la generación de energía después de Fukushima.

Fuente: Agencia Internacional de la Energía

30 May 2012 Posted by | 2011, Calentamiento global, Cambio Climático, Climate Change, Ecología, emisiones, Medio Ambiente, TOP 10 | 4 comentarios

22 de abril: Día de la Tierra y quienes la habitamos


El 22 de abril se cumplen 42 años de la primera celebración del Día de la Tierra y sus problemas para soportar las actividades de los humanos de los países enriquecidos, lejos de haberse solucionado, aumentan:

Las especies que nos acompañan desaparecen a un ritmo entre 100 y 1000 veces superior a la extinción natural.

Estamos agotando los recursos energéticos baratos y los minerales estratégicos, agotamiento que cuestiona el mito dominante del crecimiento económico continuo, sin siquiera haber logrado mantener el bienestar de 1.500 millones de personas, manteniendo a 5.000 millones sin capacidad de acceder a los mínimos estándares dignos para vivir y condenando a 1.000 millones de ellas al hambre.

La acelerada quema de combustibles fósiles impide que los ecosistemas retiren de la atmósfera de gases de efecto invernadero al mismo ritmo que se emiten y como consecuencia el calentamiento global camina sin control provocado fenómenos climáticos extremos que en nuestro país se manifiesta con la mayor sequía en 70 años con perdidas para el campo de 500 millones de euros que calcula UAGA-COAG.

La salida a esta situación pasa por el cambio del modelo productivo, con las energías renovables como base del mismo, que tienen la bondad de generar mayor cantidad de empleos, nos liberan de la dependencia externa; importamos más del 80% de la energía que consumimos, cuyo coste supuso 40.000 millones de euros el año pasado- el 80% del déficit de la balanza de pagos española-  nos aleja de guerras por petróleo o de enfrentamientos como los que en estos momentos mantiene el gobierno español con el argentino por el control de hidrocarburos y, simultáneamente, nos permitiría exportar tecnologías sostenibles.

Nuestro campo también está ahí esperando que seamos cuidadosos con nuestros suelo fortaleciendo la agricultura ecológica, intensiva en empleos, sana para quienes se dedican a la agricultura y para quienes consumimos sus productos, poniendo fin a la agricultura industrial que necesita grandes cantidades de energía, contamina nuestros suelos, aguas y nuestros propios cuerpos. En Somontes, Palma del Río, varias decenas de jornaleras y jornaleros están demostrando que nuestros campos pueden producir alimentos y empleo con las prácticas agrícolas adecuadas y con una estructura de acceso a la tierra alejada del latifundismo rentista cazador de subvenciones europeas.

Cultivos recien plantados en la finca ocupada de Somonte

Nuestras ciudades se han convertido en estos años en manzanas de viviendas casi vacías a la vez que se condenan a familias a vivir hacinados o al desahucio. Ciudades contaminadas por el transporte privado que adelanta la muerte de 16400 personas cada año y con viviendas que no nos protegen de las temperaturas extremas si no es a base de energía para aclimatarlas, la readaptación energética de nuestras viviendas puede ser fuente de ahorros económicos a la vez que un importante yacimiento de empleo para un sector tan castigado por la crisis como es el de la construcción.

Estas son algunas de las características de la senda para la salida de los problemas de Tierra y de quienes en ella estamos, senda diametralmente opuesta a la vía de recortes económicos, perdida de derechos y libertadas con los que nos está asediando el gobierno neocon de nuestro país que intenta enmascarar con el uso de la neo-lengua y que cada día inflige sufrimientos a cada vez mayor cantidad de personas y beneficia a cada vez menor número, incrementando su riqueza.

José Larios, Co-portavoz de EQUO Córdoba

Compartido en EQUO Córdoba

21 abril 2012 Posted by | Calentamiento global, Cambio Climático, desarrollo sostenible, Ecología | 2 comentarios

Repsol-IPF, IPF nacionalizada por Argentina nacionalismos y productivismo


Entre la pared argentina y la espada española: notas sobre la expropiación de YPF

In cambio climático, cooperación internacional, Economía, energía on 18 abril 2012 at 8:00

Por Florent Marcellesi

El conflicto diplomático abierto entre los gobiernos español y argentino por la expropiación de YPF tiene todos los ingredientes geopolíticos para convertirse en las “Malvinas de la energía”. Con argumentos ideológicos y estratégicos de diferentes índoles, ambos gobiernos recurren sin embargo a patrones patrióticos clásicos que, una vez más, esconden uno de los retos del futuro: superar la crisis energética y climática, es decir el final de la era del petróleo barato y abundante y el cada vez más irreversible cambio climático debido principalmente a la quema de combustibles fósiles, así como sus (retro)consecuencias sociales y económicas. Hagamos pues un repaso rápido de la situación y perspectivas.

El 16 de abril, tras meses de una táctica tradicional de acoso y derribo a Repsol-YPF (para que cayera el precio de sus acciones), la presidenta Cristina Fernández de Kirchner anuncia la expropiación de YPF, filial de Repsol en Argentina, mediante la compra del 51% de su capital. 90 años después de la creación de YPF y 20 años después de su privatización a favor de la transnacional Repsol en la época de liberalización y ajustes estructurales en los países del Sur (apoyada, por cierto, por la pareja Kirchner), YPF vuelve (casi) a la casilla de salida.

El gobierno español no ha tardado en responder con vehemencia. El ministro de Industria, Manuel Soria, ha declarado ni más ni menos que “es una decisión contra España y los españoles, no solo contra Repsol”. Más allá de que Repsol tenga menos de un 50% de capital español y de que sea grotesco asimilar los intereses de la ciudadanía española con los de los accionistas de una empresa privada, el tono catastrófico empleado recurre al más clásico patriotismo económico tintado de neocolonialismo (el control del oro negro en los países del Sur para garantizar un crecimiento con seguridad en el Norte) y de neoliberalismo (la promoción de los intereses de una multinacional de régimen privado y aficionada a los paraísos fiscales como motor del interés general). Nada mejor en tiempo de crisis que el repliegue identitario y belicista para unirse contra un enemigo común y olvidar —por unos días— la austeridad y los recortes, lo que ha surtido efecto con el apoyo del PSOE, CCOO y UGT. Mientras tanto, los partidos nacionalistas han hecho prueba de su capacidad de contorsión según se traten de intereses de clase o nacionales: CiU y PNV han privilegiado los intereses del capital, mientras que la izquierda abertzale, que lo tenía más fácil en torno al doble eje nacional vasco y socialista, ha saludado de forma efusiva la soberanía e independencia del pueblo argentino.

Si bien llego a coincidir con IU y otros movimientos de izquierdas en que la decisión del gobierno argentino es legítima y que seguramente los recursos naturales no tendrían que estar en manos de intereses privados que solo buscan rentabilidad económica y han cometido una serie de injusticias sociales y ambientales, al mismo tiempo no podemos obviar varias crudas realidades. Como bien dice Ecologistas en Acción, que saluda la decisión como un paso necesario, las razones por las que el Gobierno argentino se está planteando la nacionalización no son precisamente las ambientales. Argentina atraviesa una profunda crisis social y Fernández de Kirchner necesitaba también una medida fuerte para calmar los ánimos por los precios energéticos en el sector del transporte, garantizar divisas para pagar la deuda externa, bajar su factura energética y asentar su poder surfeandosobre la ola de la soberanía nacional que arrasa América Latina. Por el momento, es demasiado pronto para saber dónde recaerán los beneficios de esta re-nacionalización, si en el pueblo o en los oligarquías locales. Lo que está claro es que no marca ni mucho menos el fin del capitalismo (a lo mejor un empuje del capitalismo de Estado frente al capitalismo financiero), ya que el proyecto de ley de expropiación postula que la exploración y explotación (que seguramente necesitará una inversión de 25.000 millones de dólares en una década) se harán en base a “capitales públicos y privados, nacionales e internacionales”.

Pero sobre todo, no se nos tendría que escapar que detrás de esta estrategia se encuentra la voluntad no solo de controlar los recursos naturales sino de explotarlos con aún más determinación, abriendo más frentes para aumentar la capacidad de producción. Si nos fijamos de nuevo en el proyecto de ley de expropiación, además del bondadoso objetivo de “autoabastecimiento”, se trata de la explotación de “hidrocarburos convencionales y no convencionales”. Recordemos, y no es casualidad, que Repsol-YPF, descubrió el año pasado en la región argentina de Vaca Muerta el segundo mayor yacimiento de gas de pizarra (después de China) donde podrían ver la luz unos 2.000 pozos. Este gas requiere ni más ni menos que el mismo tipo de tecnología que hoy se propone utilizar en España y que ya está prohibido en Francia: el fracking o fractura hidraúlica. Como bien sabemos, gracias al trabajo de varias plataformas (Cantabria, Álava, etc.) o de documentales como Gas Land, esta técnica supone graves riesgos de contaminación del agua y del aire, de aumento del efecto invernadero así como de escapes de gas, terremotos locales y utilización masiva de químicos.

El gobierno argentino, siguiendo los pasos de otros gobiernos de América Latina como Brasil, inscribe su acción dentro del llamado extractivismo (de petróleo, gas, materias primas, etc.), particularmente agresivo con el medio ambiente y los pueblos originarios. Esta “izquierda marrón”, como la ha denominado Eduardo Gudynas, construye su estrategia de desarrollo y legitimidad a través de una apropiación brutal de los recursos naturales, su exportación en los mercados globales, con la redistribución in fine de parte de las riquezas mediante un Estado fuerte. Sin embargo, esta visión que, al fin y al cabo se parece bastante a la construcción histórica de nuestros Estados de Bienestar en el Norte, no se sostiene a largo plazo y aún menos de cara a la crisis climática y energética actual. Por experiencia y desde una perspectiva de justicia ambiental, no supone diferencia apreciable quién posea los medios de producción, si al mismo tiempo el proceso de producción en sí —ya sea público, privado o mixto— se fundamenta en suprimir las bases de su propia existencia. Como lo demuestra el pulso entre la izquierda progresista y extractivista en el poder institucional con los movimientos ecologistas, sociales e indígenas que reclaman otro modelo de desarrollo desde abajo y respetuoso de la Pacha Mama, constatamos que soberanía (estatal) y buen vivir (de las comunidades) no son por esencia sinónimos.

Más que nunca, la prosperidad, es decir nuestra capacidad de vivir felices dentro de los límites ecológicos del planeta, está entre la pared española del neocolonialismo neoliberal y la espada argentina del nacional-productivismo. Para salir de este callejón sin salida, tanto Argentina como España tendrán que emprender una transición pronunciada hacia una sociedad post-fosilista, plantear una “revolución energética” (según Greenpeace) o “caminar hacia un nuevo modelo energético sostenible y que no sea perjudicial para nuestro planeta y dejar atrás los conflictos comerciales y guerras por el oro negro, un recurso escaso y muy contaminante” (según Equo). Esta transformación socio-ecológica se basará, entre otras cosas, en dejar el oro negro y otros gases no convencionales en el subsuelo (como lo propone el proyecto Yasuní en Ecuador), reducir drásticamente nuestros consumos y huellas ecológicas, invertir en energías renovables, cambiar los patrones de producción (hacia la agroecología, ecología industrial, etc.), reruralizar y adaptar nuestras ciudades (véase las iniciativas en transición), y relocalizar urgentemente la economía para que sea baja en carbono, resiliente y gestionada democráticamente desde abajo. No es una cuestión de patriotismo: es una cuestión de supervivencia civilizada de la humanidad.

Crédito imagen: hormiga verde.

Repost del blog de mi compañero de EQUO Florent Marcellesi

18 abril 2012 Posted by | Calentamiento global, Cambio Climático, Climate Change, desarrollo sostenible, Ecología, Global warming, Medio Ambiente | 1 comentario

Cambios en los océanos pueden tener repercusiones graves en las personas



La primera síntesis completa sobre los efectos del cambio climático en los océanos del mundo ha encontrado que están cambiando a un ritmo no visto desde hace varios millones de años.

En un artículo publicado hoy en la revista Science, los científicos revelan las crecientes concentraciones atmosféricas de gases de efecto invernadero de origen humano están impulsando cambios irreversibles y dramáticos para el funcionamiento del océano, con un impacto potencial grave para cientos de millones de personas en todo el planeta.

Las conclusiones del informe «El impacto del cambio climático en los ecosistemas marinos del mundo» surgió de una síntesis de las investigaciones recientes sobre los océanos del mundo, realizado por dos de los principales científicos marinos del mundo, una de la Universidad de Queensland en Australia, y uno de la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill, en los EE.UU..

El profesor Ove Hoegh-Guldberg, autor principal del informe y Director de la Universidad de Queensland Instituto del Cambio Global, Dice que los resultados tienen implicaciones enormes para la humanidad, sobre todo si la tendencia continúa.

Dijo que el océano de la Tierra, que produce la mitad del oxígeno que respiramos y absorbe el 30% de CO2 generadas por humanos, es equivalente a su corazón y pulmones.

«Muy claramente, la Tierra no puede prescindir de su océano», dijo.

«Este estudio, sin embargo, muestra signos preocupantes de la mala salud.

«Es como si la Tierra se ha estado fumando dos paquetes de cigarrillos al día!»

El profesor Hoegh-Guldberg dijo: «Estamos entrando en un período en el que los servicios oceánicos mismos de los que la humanidad depende están experimentando un cambio masivo y en algunos casos comienzan a fallar.

«Una mayor degradación continuará creando enormes desafíos y los costes para las sociedades en todo el mundo.»

Dijo que pronto podremos ver  «repentinos, cambios inesperados que tienen graves consecuencias para el bienestar general de los seres humanos», incluyendo la capacidad del planeta de soportar a las personas.

«Esta es una prueba más de que estamos en el camino de la próxima gran extinción.»

El «fundamental e integral» cambios para la vida marina identificada en el informe incluyen el rápido calentamiento y la acidificación de los océanos, los cambios en la circulación del agua y la expansión de zonas muertas en las profundidades del océano.

Estos están impulsando grandes cambios en los ecosistemas marinos: arrecifes de coral menos abundantes, pastos marinos y manglares (viveros de peces importantes), menos peces  pequeños, una ruptura de las cadenas alimenticias, los cambios en la distribución de la vida marina, y enfermedades y plagas más frecuentes en los organismos marinos.

El Dr. John F. Bruno, coautor del informe, profesor asociado en la Universidad de Carolina del Norte, dijo que las emisiones de gases de invernadero estabán modificando varios aspectos físicos y geoquímicos de los océanos del planeta, de manera «sin precedentes en casi un millón de años».

«Esto está provocando cambios fundamentales y generales en el funcionamiento de los ecosistemas marinos», dijo el Dr. Bruno.

«Esmos cada vez más convencidos de que los ecosistemas marinos del mundo se acercan a puntos de inflexión. Estos puntos de inflexión donde el cambio se acelera y provoca efectos no vinculados en otros sistemas, resultados de que el modelo realmente no tiene el poder de prever. »

Los autores concluyeron: «Estos retos subrayan la urgencia con que los líderes mundiales deben tomar medidas para limitar el crecimiento ulterior de gases de efecto invernadero y reducir así el riesgo de que ocurran estas situaciones. Haciendo caso omiso de la ciencia no es una opción. »

En su estudio, los investigadores intentaron hacer frente a una laguna en los estudios previos que a menudo se pasa por alto los efectos del cambio climático en los ecosistemas marinos, debido al hecho de que son complejas y pueden ser logísticamente difíciles de estudiar.

El renombrado científico arrecifes de coral y ex jefe científico en el Instituto Australiano de Ciencias Marinas, John «Charlie» Verón, dice que los estudios de los arrecifes de coral han dominado previamente las investigaciones sobre los impactos del cambio climático en los ambientes marinos, dando lugar a la impresión de que esto es simplemente una » problema de los arrecifes «.

«Este artículo da un enfoque holístico refrescante a este tema donde los arrecifes no tienen el perfil más que otros ecosistemas marinos: el tema es más grande que los arrecifes», dijo el Dr. Verón.

19 junio 2010 Posted by | Calentamiento global, Climate Change, Ecología, Global warming, Medio Ambiente, Océanos | 6 comentarios

Ya nos hemos comido el 110% de la producción de la Tierra


oversoot

El 25 de septiembre de 2009 supuso algo más que unos días posteriores a la entrada del otoño en el Hemisferio Norte y la Primavera en el Sur, ese día la humanidad comienza a vivir más allá de sus medios ecológicos.  Más allá de ese día, nos movemos en el gasto deficitario ecológico equivalente  , utilizando los recursos a un ritmo más rápido que lo que el planeta puede regenerar en un año calendario.
Así al día de hoy, 21 de octubre, nos hemos comido el 110% de los recursos que el planeta es capaz de generar en un año. Esta fecha se hace pública cada año por los investigadores que crearon el concepto de huella ecológica cono indicador de la (in)sostenibilidad de nuestras actividades. Este año consumiremos la producción de 1,4 planetas Tierra, estamos usando nuestra tarjeta de crédito más allá de nuestras posibilidades y si no se modifican nuestros modelos de producción, transporte y consumo, la Tierra pasará una factura  que no podremos pagar. Paradójicamente los países enriquecidos y sus habitantes somos los que sobre abusamos de nuestra tarjeta ecológica pero son los de los paises empobrecidos los que no hacen uso del crédito y sin embargo son los que pagan y pagarán el capital y los intereses con hambrunas, catástrofes ambientales, enfermedades, etc..

Insostenible, injusto, insolidario e insoportable.

21 octubre 2009 Posted by | desarrollo sostenible, Ecología | Deja un comentario

Los Gases de Efecto Invernadero invierten la tendencia al enfriamiento del Ártico.


El nuevo estudio, publicado el día 4 por la revista Science, es el primero en cuantificar un enfriamiento generalizado en todo el Ártico década, por década que está relacionado con un ciclo de aproximadamente 21.000 años de oscilación
de inclinación de la Tierra en relación con el sol. Durante los últimos 7.000 años, el momento en que la  la Tierra pasa más cerca del Sol se ha desplazado desde septiembre hasta enero. Esto ha reducido gradualmente la intensidad de la luz solar que llega al Ártico en verano, cuando la Tierra está más lejos del sol.
El análisis de la temperatura del equipo de investigación muestra que las temperaturas de verano en el Ártico, de acuerdo con la reducción de la energía del Sol, se enfría a una tasa promedio de aproximadamente 0,2 grados centígrados  cada mil años. La temperatura finalmente tocó fondo durante la «Pequeña Edad de Hielo», un período de enfriamiento generalizado que duró aproximadamente desde el siglo 16 hasta mediados del siglo 19.
A pesar de que el ciclo orbital que produce el enfriamiento continúa, fue modificado en el siglo 20 por el calentamiento inducido por el hombre. El resultado es que las temperaturas de verano en el Ártico en el año 2000  fueron alrededor de 1,4 grados C más altas de lo que habría podido esperarse de la refrigeración cíclica.
«Si no hubiera sido por el aumento de la producción humana de gases de efecto invernadero, las temperaturas de verano en el Ártico se habrian enfriado gradualmente a lo largo del siglo pasado», dice Bette Otto-Bliesner, científico del NCAR que participaron en el estudio.

Los resultados se han obtenido del estudio de los sedimentos de algas, cantidad y grosor de los mismos, de los lagos de la zona y del estudio de los anillos de los troncos de los árboles.

Fuentes: National Science Fundation,NSF. University Corporation for Atmospheric Research,UCAR.

7 septiembre 2009 Posted by | Calentamiento global, Cambio Climático, Climate Change, Ecología, Global warming, Medio Ambiente | | 1 comentario

La Fundación MAPFRE presenta un Informe sobre la Percepción del Cambio Climático en la Sociedad Española


A grandes rasgos, del estudio que hoy se presenta, prácticamente 7 de cada 10 ciudadanos son capaces de identificar el vector causal más importante: la emisión de gases de efecto invernadero, señalada por el 69,7% No obstante, 4 de cada 10 personas aún tienen dudas acerca de cuáles son sus verdaderas causas.

Todavía se mantienen creencias científicamente erróneas que “conviven” con las correctas: el 67,1% achaca el Cambio Climático al agujero en la capa de ozono y el 53,6% a la lluvia ácida. Muchos encuestados, lo ven como un fenómeno lejano, cuyos efectos más graves se verán principalmente a largo plazo (54,3%), perjudicando especialmente a las generaciones futuras (73,8%), más que a los presentes.  Sólo un 22,1% de los encuestados elige la explicación científicamente correcta al efecto invernadero.

Por lo que me toca destaco que los encuestados a quienes menos escuchan hablar sobre el Cambio Climático son los profesores, 23% y los empresarios 19,7%. Aunque entre los más jóvenes varía esta proporción pues el 42,6% ha ecuchado hablar a sus profesores de este asunto, lo que es más esperanzador.

En cuanto a la confianza en la información ocupan el último lugar los empresarios seguidos por los ayuntamientos, comunidades autónomas y gobierno central, por ese orden.

Descargar informe

26 marzo 2009 Posted by | Calentamiento global, Cambio Climático, Climate Change, Ecología, Global warming, Medio Ambiente | | Deja un comentario

España aumenta un 43% sus emisiones para 2020 sobre las bases del Protocolo de Kioto


En los documentos elaborados por el Ministerio de Medio Ambiente se recoge que en 2007 las emisiones de CO2e alcanzaron 442.322 miles de toneladas lo que equivale a un incremento de 52’6% sobre la base de 1990 que recoge el Protocolo de Kyoto. En este acuerdo se permitía a España superar las emisiones base un 15% para el año 2012, objetivo que claramente no se alcanzará.

En los mismos documentos el Gobierno afirma que adoptando medidas de reducción en el año 2020 España emitirá un 42% más que en 1990 (410.638 ktCO2e) mientras que la propuesta de la UE es reducir las emisiones un 20% ó 30% si hay acuerdos globales.

Ya las propuestas de la UE están por debajo de las recomendadas por la mejor ciencia y que reconoce en los documentos de la Comisión de Medio Ambiente, así que resulta vergozoso que en este marco España no proponga ni tan siquiera volver a las emisiones de 1990 como ha propuesto Obama para su país.

De nuevo las propuestas quedan muy lejos de lo que se afirma en los discursos públicos de nuestro presidente y demás responsables de gestionar el Cambio Climático.

15 marzo 2009 Posted by | Calentamiento global, desarrollo sostenible, Ecología, Energía, Global warming, Medio Ambiente | , | 4 comentarios