Resultado del apagón por la hora del planeta en España
En este gráfico de demanda continua que Red Eléctrica de España publica en su web se puede apreciar una disminución del consumo sobre el previsto (línea verde).
Los principales monumentos de las ciudades se sumaron al apagón pero es difícil valorar el seguimiento general de la población.
Destacar también la importante contribución la eólica, 25%.
Por cierto, el Planeta se la arregló para existir sin nosotros y se las arreglará en el futuro.
El problema del Calenamiento Global es para nosotros y muchas de las especies que nos acompañan. Estaría bien que en las convocatorias y consignas o tips tubieramos en cuenta que es nuestra civilización la que peligra y parte de las especies que comparten la existencia con nosotros y no la Tierra que permanecerá muchisimos millones de años sin sus actuales inquilinos y no necesita salvarse.
La Fundación MAPFRE presenta un Informe sobre la Percepción del Cambio Climático en la Sociedad Española
A grandes rasgos, del estudio que hoy se presenta, prácticamente 7 de cada 10 ciudadanos son capaces de identificar el vector causal más importante: la emisión de gases de efecto invernadero, señalada por el 69,7% No obstante, 4 de cada 10 personas aún tienen dudas acerca de cuáles son sus verdaderas causas.
Todavía se mantienen creencias científicamente erróneas que “conviven” con las correctas: el 67,1% achaca el Cambio Climático al agujero en la capa de ozono y el 53,6% a la lluvia ácida. Muchos encuestados, lo ven como un fenómeno lejano, cuyos efectos más graves se verán principalmente a largo plazo (54,3%), perjudicando especialmente a las generaciones futuras (73,8%), más que a los presentes. Sólo un 22,1% de los encuestados elige la explicación científicamente correcta al efecto invernadero.
Por lo que me toca destaco que los encuestados a quienes menos escuchan hablar sobre el Cambio Climático son los profesores, 23% y los empresarios 19,7%. Aunque entre los más jóvenes varía esta proporción pues el 42,6% ha ecuchado hablar a sus profesores de este asunto, lo que es más esperanzador.
En cuanto a la confianza en la información ocupan el último lugar los empresarios seguidos por los ayuntamientos, comunidades autónomas y gobierno central, por ese orden.
De mal en peor
La semana pasada un nutrido grupo de científicos se han reunido en Copenhague para revisar como ha ido evolucionando el conocimiento sobre el calentamiento global y como han variado las emisiones de CO2.
Las conclusiones no son nada complacientes. todas las variables y pronósticos anteriores han quedado pequeños.
Para muchos parámetros fundamentales, el clima ya se está moviendo más allá de las pautas de variabilidad natural en el que nuestra sociedad y la economía han desarrollado y prosperado.
La emisiones han crecido por encima del pero de los escenarios, triplicando el crecimiento anual en los años del presente a las emisiones del pasado siglo.
Si los documentos hablaban de no superar los 2ºC ahora estamos en vías de alcanzar los 3ºC y aseguran que debemos prepararnos para una elevación de la temperatura de 4ºC.
Los países empobrecidos están siendo y serán los más afectados.
Tenemos las herramientas técnicas para afrontar la reducción de las emisiones.
Afirman que no hay excusa para no actuar de forma profunda y decidida.
Las conclusiones, al completo, se harán públicas en el mes de junio con el objetivo de dar elementos de juicio a los negociadores de Copehague en el COP15 que se celebrará en diciembre de este año para poner en marcha los acuerdos postKyoto.
Las consecuencias de la elevación de la temperatura a los niveles pronosticados van a ser difíciles de asimilar, en algunos lugares, como ya se está haciendo en Hamburgo o en Holanda se están invirtiendo millones de euros para intentar hacer frente a la elevación del nivel del mar, sus planes ya han quedado superados por los nuevos pronósticos. Pero a la falta de alimentos dificilmente se le puede hacer frente, ya en este año las sequías van a someter a riesgo de hambrunas a la quinta parte de la humanidad. En un clima 3ºC ó 4 ºC más cálidos la respuesta va a ser las migraciones masivas y las muertes. Si la mitigación se puede afrontar con más o menos dificultades la adaptación puede ser imposible.
Ante esta situación es necesaria la movilización de todas las personas conscientes para frenar el proceso, aumentar el número de personas implicadas en la tarea de frenar el calentamiento global y obligar a nuestras industrias y gobernantes a pasar del lavado verde a un firme compromiso para cambiar de rumbo y de modelo. La crisis actual es nada con lo que se avecina, lo ha dicho Stern, pero puede ser una oportunidad para iniciar el cambio.
España aumenta un 43% sus emisiones para 2020 sobre las bases del Protocolo de Kioto
En los documentos elaborados por el Ministerio de Medio Ambiente se recoge que en 2007 las emisiones de CO2e alcanzaron 442.322 miles de toneladas lo que equivale a un incremento de 52’6% sobre la base de 1990 que recoge el Protocolo de Kyoto. En este acuerdo se permitía a España superar las emisiones base un 15% para el año 2012, objetivo que claramente no se alcanzará.
En los mismos documentos el Gobierno afirma que adoptando medidas de reducción en el año 2020 España emitirá un 42% más que en 1990 (410.638 ktCO2e) mientras que la propuesta de la UE es reducir las emisiones un 20% ó 30% si hay acuerdos globales.
Ya las propuestas de la UE están por debajo de las recomendadas por la mejor ciencia y que reconoce en los documentos de la Comisión de Medio Ambiente, así que resulta vergozoso que en este marco España no proponga ni tan siquiera volver a las emisiones de 1990 como ha propuesto Obama para su país.
De nuevo las propuestas quedan muy lejos de lo que se afirma en los discursos públicos de nuestro presidente y demás responsables de gestionar el Cambio Climático.
A LAS MUJERES SABIAS Y RESISTENTES AL PETROLEO Y AL CAMBIO CLIMÁTICO
LAS MUJERES PRINCIPALES VÍCTIMAS DEL CAMBIO CLIMÁTICO
El cambio climático está provocando graves impactos en el mundo, pero sobre todo en el Sur, ya que el cambio climático castiga doblemente a nuestros países, como Perú, Ecuador, Bolivia o cualquier otro del área andino amazónica, de África, o el sudeste asiático. Algunos de los impactos ya se sienten y otros llegarán indefectiblemente. Estos son:
Las reservas de agua contenidas en los glaciares y la cubierta de nieve disminuirán vertiginosamente y con ellas el agua dulce disponible, por lo que se reducirá significativamente la disponibilidad para el consumo humano, la agricultura de al menos 1/6 parte de la población mundial. Sudamérica es una de las regiones más afectadas. Las mujeres son quienes tendrán que recorrer mayores distancias para encontrar agua. A su vez, las sequías serán más frecuentes y prolongadas y las mujeres tendrán que desplazarse mucho más para recoger la leña. En los bosques tropicales, el aumento de las temperaturas y la pérdida de agua subterránea reducirá la biodiversidad, lo cual tendrá un impacto sobre los medios de vida de muchas comunidades indígenas. La Amazonía se convertirá en una gran sabana. Las mujeres mantienen las chacras y viven directamente de los productos de la selva por lo que su soberanía alimentaria y sus culturas se verán afectadas.
En las zonas áridas, las tierras agrícolas se volverán arenosas y salinas, disminuirán las cosechas y la productividad del ganado, amenazando así la seguridad alimentaria. Declive de las cosechas principalmente en África. Un último informe señala que en algunos países africanos el impacto es tan espeluznante que se espera una reducción del 50% en la producción agrícola para el 2020 y del 90% hasta el 2100; un 30% en Asia para el 2050 y 30% en América Latina en el 2080. Millones de mujeres indígenas y campesinas son las que se encargan de los cultivos y de la alimentación para la familia, las mismas que se verán más afectadas pues pues complicará la producción de alimentos para consumo doméstico, así como la pesca y la ganadería. En los países del Sur todas estas actividades están realizadas en un 90% por mujeres. Seguir leyendo
Sumidero de carbono de la Amazonía amenazado por la sequía
La Amazonía es sorprendentemente sensible a la sequía, de acuerdo a las nuevas investigaciones realizadas en el más grande del bosque tropical de todo mundo. Los 30 años de estudio, publicado hoy en Science, proporcionan la primera evidencia sólida de que la sequía provoca la pérdida masiva de carbono en los bosques tropicales, principalmente a través de la muerte de los árboles.
«Durante años la selva amazónica ha contribuido a frenar el cambio climático. Pero confiar en esta subvención de la naturaleza es extremadamente peligroso «, dijo el profesor Oliver Phillips, de la Universidad de Leeds y autor principal de la investigación.
«Si los sumideros de carbono de la Tierra se ralentizan o van a la inversa, ya que nuestros resultados muestran que es posible, los niveles de dióxido de carbono aumentarán aún más rápido. Mayores reducciones de las emisiones serán necesario para estabilizar nuestro clima. »
El estudio, una colaboración global entre más de 40 instituciones, se basa en la inusual sequía de 2005 en la Amazonía. Esto permite dar un vistazo a los científicos del futuro del clima de la región, en el que un calentamiento del Atlántico norte tropical puede causar más caliente y más intensas temporadas secas.
La sequía de 2005 invertió bruscamente decenios de absorción de carbono, en los que la Amazonia ayudaron a frenar el cambio climático.
En años normales el bosque absorbe casi 2 millones de toneladas de dióxido de carbono. La sequía provocó una pérdida de más de 3 millones de toneladas. El impacto total de la sequía – 5 millones de toneladas adicionales de dióxido de carbono en la atmósfera – supera las emisiones anuales de Europa y Japón juntos.
«Visualmente, la mayoría de los bosques parece poco afectado, pero nuestros registros demuestran una aceleración de las tasas de mortalidad de árboles. Debido a que la región es tan grande, incluso pequeños efectos ecológicos puede incrementar en gran impacto en el ciclo del carbono del planeta », explicó el profesor Phillips.
Fuente: Science Centric
